Comparan denuncia de San Antonio con caso que condenó al juez Bernardi
Lo manifestó una dirigente social de Viedma. Lo vincula por la presunta participación de hombres cercanos al poder.
San Antonio Oeste. En Viedma aseguran
que la denuncia por presunto abuso sexual de una menor en una fiesta plagada de
excesos que se habría realizado en San Antonio es tan grave como la causa que
terminó con el juez Juan Bernardi (foto) preso, junto a otros hombres.
“La banda de los viejos” llamaban las adolescentes de origen humilde, quienes recibían dinero a cambio de mantener relaciones íntimas.
Una dirigente social de la capital provincial que trabajó activamente en ese caso lo comparó con el que se comenzó a investigar.
Lo vincula por la presunta participación de hombres con poder.
“Es similar. Es vergonzoso que el estado provincial y gente que tiene que cuidar a los niños a veces tape, esconda tras otra mirada diciendo otras cosas. Algo que es realmente dañino y doloroso”, sostuvo Mari Donadío en una entrevista que le realizaron por Radio Nacional.
Donadío integra la Red de Equidad de Género, conformada por distintos actores sociales e instituciones, y que se plantó en la defensa de menores víctimas.
Sostuvo que en la causa, una de las personas que testimonias trabaja en un organismo que protege menores.
En la nota le preguntaron a Donadío el motivo porque el caso tiene escasa difusión en los medios de prensa, y la posible maniobra para silenciarlo.
Respondió, como explicación a ese detalle, que estarían involucrados “políticos”.
Como lo informó este medio el último lunes, la denuncia se presentó la semana anterior en Fiscalía de Viedma.
La investigación está a cargo de Paula Rodríguez Frandsen, quien ordenó diversas medidas, entre ellas la toma de declaraciones testimoniales.
Desde un primer momento se mencionó que el presunto abuso ocurrió en una reunión social registrada hace un año o año y medio atrás, en la que participó la menor y hombres adultos.
La niña, entonces de unos 14 años, habría mantenido relaciones sexuales.
La acusación por delitos sexuales en San Antonio no es nueva, pero se ha utilizado en los últimos tiempos como arma de ataque.
Han pintado paredones e impreso volantes en evidentes campañas en las que aparecen claramente ideólogos y gente que transita la marginalidad y despachos oficiales como mano de obra.
La alegoría bíblica de la soga parece cumplirse.