El juez Julio Sueldo decidió postergar hasta febrero los alegatos de cierre en la causa contra Elida Beatriz Rosa quien fue llevada a juicio acusada de amenazas al personal de Ipross en Cipolletti. El jueves pasado estaba previsto que se escuchen los alegatos, pero en la instancia preliminar se trató el pedido que había solicitado el defensor público Sebastián Nolivo de incluir, entre las pruebas, los recursos de amparo que la mujer había prestado ante el juzgado de Familia. Allí, daba cuenta de la cantidad de reclamos que hizo contra la obra social de la provincia por la falta de cobertura a su hija.

La imputada tiene una hija de 3 años con síndrome de down y una displasia de cadera. En diciembre de 2017 la mujer protagonizó un escándalo en la sede de Cipolletti tras recibir una nueva negativa por parte de la obra social sobre una atención para su hija. Por esa razón el Ministerio Público Fiscal la llevó a juicio, acusándola de los delitos de amenazas y perturbación en el organismo público.

La negativa de Ipross ante este reclamo fue lo que generó el enojo de la mujer. El juez de Familia Jorge Benatti no solo ordenó que se haga cargo de ese traslado sino que intimó a la obra social a pagar 20 mil pesos de multa en caso de no hacerlo. En la audiencia del jueves pasado, Sueldo, decidió aceptar la incorporación de esa prueba y por ello solicitó un cuarto intermedio hasta después de la feria judicial con el fin de analizar el escrito.

En los alegatos de apertura, el fiscal jefe Gustavo Herrera adelantó que solicitarán una condena excarcelable, es decir menor a tres años. “La razón de este juicio es la de imponer límites a las conductas violentas. Quien pretende hacer valer un derecho tiene toda la facultad de hacerlo, pero debe realizarlos dentro del marco de la ley”, sintetizó Herrera en ese momento.