Las autoridades educativas no tiene posición tomada aún en qué día de esta semana podrán normalizar el servicio en el edificio escolar de Guardia Mitre como consecuencia de una fuga de gas que días atrás arrojó un saldo de tres estudiantes con principios de intoxicación.

Aun cuando existe cierta hermeticidad oficial, se supo que la semana pasada un profesional matriculado de esa localidad detectó la fuga ante las afecciones de estas tres personas que fueron internadas en el hospital local, y una de ellas tuvo que ser derivada al hospital Zatti de Viedma.

Frente a ese panorama preocupante se suspendieron por 48 horas las clases durante el jueves y viernes, y paralelamente, personal de la distribuidora Camuzzi Gas del Sur decidió retirar el medidor.

La primera solución que se encontró es la presencia durante esta semana de otro profesional matriculado de primera categoría, quien será enviado desde Viedma, paraelaborar un diagnóstico y recomendar trabajos de carácter estructural como para que se pueda regularizar el funcionamiento.