VIEDMA.

El hombre había desaparecido a principios de septiembre de la capital rionegrina, y sus restos fueron hallados el último viernes a la vera del río Negro.

Cuarenta y ocho horas después del hallazgo del cuerpo de Ignacio Alan, quien se encontraba desaparecido desde principios de septiembre en Viedma, aún se desconocen los motivos de su deceso.

La investigación del hecho es llevada adelante por el fiscal Pedro Puntel, cuya área intervino tras el hallazgo de restos humanos el viernes último en un predio cercano a la vieja Ruta 3, a la vera del río Negro.

La identidad fue determinada por los estudios realizados por el Cuerpo de Investigación Forense sobre las piezas dentales encontradas, a los que se sumó el hallazgo de prendas que coincidían con las que lucía Alan cuando fue visto por última vez.

Alan padecía demencia senil y la última información que se tenía sobre él apuntaba que se había subido a un taxi frente al barrio América, a cuyo conductor le pidió que lo trasladara al campo.

El último rastro indicaba que el hombre estuvo en cercanías de la rotonda de la actual y la vieja Ruta 3, donde un video lo mostraba circulando en dirección al Vivero Provincial, a la vera de la cinta asfáltica. A ello, también se sumó el testimonio de un testigo que dijo haberlo visto cerca del predio de la Peña Azul y Oro.