Los restos óseos serían de Camilo Morales, acusado de un doble homicidio
Así lo informó el Ministerio Público Fiscal. Encontraron documentos personales, celulares y un arma. La autopsia lo confirmará.
San Antonio Oeste. Los restos
óseos encontrados ayer en la zona de médanos situados en la zona de la
periferia sur de esta localidad pertenecerían a Camilo Morales, acusado de
haber cometido un doble homicidio en Viedma en abril de este año.
El Ministerio Público Fiscal informó en un parte de prensa que junto con las piezas también encontraron papeles en los que aparece el nombre de Morales, un cuchillo, celulares y el arma de fuego que habría sido sustraída de la vivienda de las víctimas del hecho, Lilian Lantelme, de 83 años, y de su hijo Fabián Zaher, de 56.
El lugar es de difícil acceso, y está ubicado en inmediaciones del camino que conduce a la planta de Alpat, detrás del cementerio municipal.
Allí trabajaron efectivos de la policía, del Gabinete de Criminalística y Bomberos, bajo la conducción de la fiscal Mariela Coy.
Cuando fueron retirándose, se observó que la mayoría vestía overoles blancos y usaban barbijos.
Cerca del mediodía también arribó de Viedma el fiscal Juan Pedro Puntel y Mary Carrizo, jefa de la Brigada de Investigaciones de la fuerza.
Los uniformados demarcaron el sitio e impidió el acceso de los trabajadores de prensa. También se observó a algunos vecinos que se acercaron al conocer la noticia a través de medios radios.
El cuerpo será trasladado a Viedma para realizar la correspondiente autopsia que determinaría causas y fecha aproximada del deceso.
Además se realizarán las pericias y estudios correspondientes que puedan confirmar científicamente la identidad del hombre.
Lo buscaron por ese sector
Cuando se produjeron los crímenes la búsqueda del autor se realizó en Viedma y luego se extendió a San Antonio, dado que Morales alquilaba una habitación en un inquilinato en inmediaciones de Alemandri y Mitre.
Ese inmueble fue allanado, y se determinó que el hombre había cambiado de fisonomía: se había rapado la cabeza y afeitado el bigote.
A partid de esos datos los investigadores iniciaron un rastrillaje que incluyó precisamente las inmediaciones donde ahora aparecieron los restos.
Se presumió entonces que Morales había pasado por el sector, pero que podrían haber abordado un vehículo en el que dejó la región.
El Ministerio de Seguridad provincial ofreció una recompensa de 500.000 pesos, pero no surgieron datos.