San Antonio Oeste. El fiscal Juan Pedro Puntel resolvió archivar la causa por la explosión e incendio que a principios de 2015 se produjo en una vivienda de Puerto San Antonio Este, y que provocó el falleció de un muchacho de 25 años en aquel momento.

La caratula del caso fue “Investigación por muerte dudosa”.

La víctima fue Claudio Sergio Daniel Barrera, un joven de 25 años oriundo de Buenos Aires que había llegado a la zona para trabajar en un restaurant y había alquilado el inmueble junto a su novia, que no estaba al momento del hecho.

Barrera sufrió lesiones por quemadura en el 85% del cuerpo y fue trasladado al hospital Zatti de Viedma, donde murió pocos días después por “hipoxemia severa”.

La investigación se tramitó ante la sospecha de que hubiera intervenido “dolosamente alguna persona”.

Pero se determinó que “más allá del voluminoso cuadro testimonial del que no surgen indicios de intencionalidad por parte de persona alguna, pese a lo sostenido por la madre de la víctima, con el informe pericial elaborado por el Jefe del Cuerpo de Bomberos de San Antonio Oeste, se estableció que la causa del siniestro debe encuadrarse como ´hipotético accidental´”.

Además se le dio intervención a la Brigada de Investigaciones, entre otras medidas, “tendientes a determinar la existencia de indicios de criminalidad que puedan vincular a la entonces pareja de la víctima con el hecho, arrojando resultados negativos”.

En base a estos elementos el fiscal sostuvo que “no existiendo en autos elementos que permitan sostener acusación en contra de persona alguna, sino por el contrario, atento las conclusiones de los peritos intervinientes, considero que la presente investigación debe ser archivada por aplicación”.

La principal hipótesis que se manejó entonces fue que el estallido y posterior incendio se produjo por la pérdida de gas de una garrafa

El incidente ocurrió el domingo 1 de febrero de 2015 alrededor de las 21 en un departamento posterior ubicado en Kandava 465.

Se presumió que prendió la luz o un cigarrillo. Tras la explosión sobrevino un incendio que se propagó por toda la casa y afectó un depósito aledaño.

Vecinos contaron que el joven fue despedido por la onda expansiva, y que apareció en el frente de la casa. Tenía el cuerpo totalmente quemado, y alcanzó a balbucear algunas palabras.

El estrépito se escuchó en toda la villa y generó enorme conmoción entre los habitantes.